En soledad
Me encuentro en soledad,
me llamas, lo escucho en el silencio.
Lo percibo en la noche oscura,
aunque esté vacío tu lado de la cama.
Siento tus manos en mi cuerpo,
tu calor me conforta el alma.
La llama que soy, que arde
en mi corazón, no se apaga.
Me aceleras el pulso,
es un torrente mi sangre en las venas.
Me palpita el pecho, laten las sienes,
se me cierra la garganta.
Asi, implorante, desnuda,
gritándole sin voz al silencio,
sola en esta noche, te deseo,
te necesito con toda mi alma...